LAS FATALES PREDICCIONES DE GERTRUDIS

Dr. Pedro Alfonso González Ojeda

Mi prima Gertrudis suele ser muy atinada en las predicciones necesarias para continuar el camino del dos mil veinte. No es fácil hallarla cuando requiero escribir este Blog. Se me esconde, no me contesta las llamadas o de plano anda de juerga y se pasa varios días en el japi japi. Finalmente se comunicó, por lo que implantamos una cita semanal para no fallar y aunque en principio se mostró reticente, el acuerdo fue vernos en el café gringo que está en la principal calle de esta ciudad tunera.

Cómo ves este primer semestre del año, fue la pregunta inicial. Pues mira primo el pasado no me interesa, ya lo sabíamos desde diciembre, la erradicación mundial de los viejos es tema de las principales organizaciones capitalistas. No me gustó nada ese comentario, pero continuamos. Está bien, qué crees que suceda de aquí a fin de año. Me miró levantando una ceja; primero, hizo una bolita con la esquina de una servilleta la lanzó con un garnucho hacia la mesa contigua; la pandemia sigue su curso inexorable e infinito hasta que el virus creado en China tenga una mutación que lo atarante y nos deje en paz o la vacuna logre amputar su brazo maldito. Pero en cuanto a la economía no hay la menor duda que no progresaremos en los próximos cinco años, aunque de todos modos no íbamos a crecer hasta que tengamos a una oposición gobernando, pero eso es otra cosa, yo veo muy complicado lo que va a surgir como consecuencia, la gente está harta, el narco avanza en todas las esferas, la gente cada vez se droga más, la tolerancia hacia los demás es nula, cualquier persona que veas en la calle, tiene deseos de salir y ametrallar a sus semejantes, entonces el odio colectivo está en el borde de las emociones y si en Venezuela el vandalismo fue enorme y la represión peor, imaginen lo que sucederá entre nosotros. Entonces tu crees prima, que estaremos cómo la Venezuela de Maduro. No te hagas menso, eso tú lo vaticinaste desde antes de las elecciones recientes, pero eso no es todo lo malo. El pésimo tratamiento que se le está dando a la sepultura de los fallecidos, sin vaciar concreto en las fosas para sellarlas, permitirá que tengamos peste, otra epidemia mortal y así sucesivamente. Piensa que se necesita por lo menos el diez por ciento de la población mundial muerta, para mas o menos alivianar el planeta. Para fin de año habrá escasez de agua, alimentos y medicinas, mas que ahora, esto tiene otras connotaciones. 

Gertrudis vio en mi cara el arrepentimiento de haberla buscado y dijo con un poco de sarcasmo: ¿le sigo a las predicciones primo? Pedí la cuenta, me levanté de la mesa y como zombi me dispuse a salir del cafetín. Antes de cruzar el umbral de la puerta me gritó: ¡Por eso ando de pachanga todos los días!

Cada vez estoy más convencido de que el ciclo de la humanidad se cerrará muy pronto. ¿qué debemos hacer con nuestras vidas? Respuesta fácil ¡Nada! A estas alturas debemos dejar pasar a las generaciones que empujan, poner en paz las conciencias y hacerles a los nietos la vida más feliz. Aceptar que el virus nos saque del confinamiento para meternos al hospital y si se logra un ventilador a darle y si no, pues muchas gracias a todos y con permiso.