¿ACASO ESTE ES MI ULTIMO ARTICULO?

Dr. Pedro Alfonso González

23/3/23 es un número capicúa. Se lee igual de derecha a izquierda y viceversa. Pero, deberán preguntarse qué con eso. Sin embargo, me daré a la tarea de explicar cual es el propósito de comentarlo. Y con todo gusto, les adelanto la fatídica situación a unas horas de que suceda.

Según un individuo desconocido y medio loco, dice ser viajero en el tiempo y que mañana nos cargará el payaso sin pandemia, es decir, que un Alíen de mala entraña, vendrá a la tierra y como coleópteros en hormiguero, serán fumigados más de veinte mil ochocientos noventa millones de habitantes de este mundo. Serán salvados por otro Alíen, este si buena gente, ocho mil terrícolas abducidos, entre los que obviamente nos encontramos la familia, los cuates y unas señoras de las Gorditas de Morales comandadas por Doña Lupita.

El viajero Eno Alarix, mejor conocido en su planeta como el aguafiestas, asegura que viene del año 2671 y que se ha estado peleando con un émulo de Dart Vader durante los últimos cien años. La verdad no sé porque escogió ese año para venirnos a ayudar a unas horas de que esto suceda, sin embargo, se hace llamar “El campeón” y que le romperá la crisma al Alienígena hostil, cuya nave nodriza se halla situada a unos sesenta mil kilómetros de la tierra. Esto en realidad no es lejos para las velocidades de los extraterrestres, que en microsegundos pueden ir y volver por los tacos de canasta, de los de Juan de Oñate, que siempre están buenísimos. Bueno,  ese ser hostil y pendenciero -desconozco su nombre-, tiene muchas ganas de lanzar toda su energía bélica y desde la nodriza, nos pegue una madriza de padre y señor mío.

El sujeto maloso, provocará un tsunami de más de doscientos metros que afectará la costa oeste de Gringolandia, arrasando con San Francisco, Oakland y Los Ángeles. No menciona la hora ni si será antes o después del desayuno o más tardecito. Aconsejo a los habitantes de la zona, que tomen precauciones y si tienen tiempo de salir de ahí, cosa que dudo mucho, lleven agua embotellada y “Güisky” Jack Daniels, es delicioso y evita las molestias de enojarse por la hecatombe.

A decir del amigo Alarix, todos los meses de este año, en el día 23, habrá manifestaciones y desgracias, pero esos ocho mil premiados con sobrevivir, nos iremos a un planeta que orbita entre marte y la tierra, donde hay agua suficiente – por eso mi sugerencia del chupetín- y hay oxígeno de sobra.

De última hora me informan que a nuestro país no la pasará algo extraño, parece que solo en Palacio Nacional habrá daños colaterales, espero que no sea la publicación de otro libro.

Hasta el próximo, desde otro planeta.